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Extracto:Una centenaria sastrería de Berlín ha sido inundada con pedidos de mascarillas de colores elaboradas por sus costureras, después de suspender la producción de sus reconocidas pajaritas hace dos semanas por la pandemia del
BERLÍN, 7 abr (Reuters) - Una centenaria sastrería de Berlín ha sido inundada con pedidos de mascarillas de colores elaboradas por sus costureras, después de suspender la producción de sus reconocidas pajaritas hace dos semanas por la pandemia del coronavirus.
Auerbach, que es famosa por sus coloridos accesorios para hombres como bufandas y corbatas, ha recibido 8.000 pedidos de sus mascarillas hechas a mano, que se venden a 18 euros por unidad, desde que comenzó a venderlas el mes pasado.
Su consejero delegado, Jan-Henrik Maria Scheper-Stuke, dijo que tuvo que sumar 20 costureras más a las siete que ya tenía antes de la crisis para cubrir la avalancha de pedidos por internet, que sigue creciendo con entre 800 a 1.000 pedidos nuevos de mascarillas por día.
“La necesidad es la madre de la invención”, comentó Scheper-Stuke. “No tenemos beneficios por hacer las mascarillas. Sólo queremos cubrir nuestros costes. Es un ejercicio de supervivencia. No podemos esperar a volver a hacer corbatas para bodas y otros acontecimientos felices”, agregó.
La mayoría de los pedidos en línea vienen desde Alemania, Austria y Suiza, pero han llegado algunos de lugares tan lejanos como Hong Kong.
“Cuando pusimos anuncios de que buscábamos costureras en un diario local, recibimos cientos de solicitudes”, dijo Scheper-Stuke. “Tuvimos que rechazar gente. Y tuvimos que enseñar a las nuevas costureras cómo hacer las mascarillas”, añadió.
Alemania, que tiene cerca de 100.000 casos confirmados y algo más de 1.600 muertes por COVID-19, no obliga a usar mascarillas en lugares públicos.
La canciller Angela Merkel dijo el lunes que usar mascarillas no evitaría necesariamente que la gente se infecte de coronavirus y que las mascarillas hechas de tela pueden propagar la enfermedad si no se lavan de forma regular.
“Un mal uso podría ser aún más dañino”, dijo Merkel cuando se le preguntó si el gobierno recomendaría usar mascarillas. “Deben lavarse regularmente, evitar su uso durante un período prolongado, plancharlas o calentarlas en el horno o el microondas”, agregó.
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